Si todavía no se sabe del todo bien cómo regular los mandos de la moto, aquí se darán todas las claves. De hecho, esto servirá de ayuda para saber cómo conducir una moto con mal tiempo o cómo levantar la moto del suelo. Por ello, es recomendable que se sigan los siguientes pasos para ajustar los mandos de la moto con detenimiento.
Cómo regular los mandos de la moto
Entre las distintas formas de regular los mandos de la moto que existen, aquí se hablará de una con detalle. Y es que la motocicleta, en muchos casos, es la extensión de uno mismo. De hecho, como ocurre con los coches, se establece un vínculo emocional que lleva a cuidar del vehículo para mantenerlo en el mejor estado posible.
Por esta razón, es preciso que se ajusten los mandos, por una cuestión de comodidad, pero, sobre todo, por motivos de seguridad. Para efectuar dicha labor, basta con seguir los pasos que aquí se comentan, comenzando por colocar la moto sobre un caballete central o de taller.
Regular la maneta del freno
Hay que jugar con la inclinación de la maneta, haciendo que los dedos queden estirados en la línea de prolongación del brazo. Es posible que sea preciso inclinar todo el manillar. Pero, en algunos casos, bastará con girar directamente el soporte de madera. Además, es imprescindible tener en cuenta la separación de la maneta, de manera que el agarre sea cómodo con la segunda falange.
Regular el juego del puño del acelerador
Este es otro punto relevante, ya que de ello dependerá la precisión para acelerar. Para ajustarlo, lo mejor es regular las ruedas de ajuste que están al final de la cubierta del cable del acelerador.
Para que funcione mejor, la rotación del puño tiene que ser muy fluida, debiendo volver al punto original de un golpe, en lugar de despacio. Antes de terminar, hay que asegurarse de que los ajustes no se cambian cuando el manillar se gira bruscamente de un lado a otro.
Regular el juego del embrague
Si la moto cuenta con un embargue por cable, un buen ajuste será clave para la conducción. Por ejemplo, demasiada suavidad hace que la caja cruja con cada cambio de marcha. En cambio, demasiada tensión hará que el patine en las aceleraciones más fuertes. Por tanto, lo mejor es ajustarlo al tacto de cada uno.
Ajustar el selector de las marchas y el pedal del freno
El paso final será ajustar el selector, de modo que se pueda deslizar el pie izquierdo sin muchas contorsiones. Lo adecuado sería deslizar la bota sobre la estribera, pero sin chocar contra el selector. Para el pedal del freno, hay que buscar la misma posición que el selector, bajo la suela de la bota. Pata ello, hay que jugar con la bieleta y modular la altura.
En resumen, ahora que ya se sabe cómo regular los mandos de la moto, basta que se ponga en práctica lo aprendido. Ello hará que la conducción sea más segura e incluso reforzará el vínculo emocional con el vehículo.
