Para la masa:
500 gr. de harina de fuerza.
10 gr. de sal.
100 gr. de azúcar.
3 huevos.
100 gr. de mantequilla.
190 gr. de agua.
35 gr. de levadura fresca de panadería.
Ralladura de 1/2 limón.
1/2 cucharadita de canela en polvo.
Para la crema pastelera:
100 gr. de azúcar.
500 gr. de leche entera.
50 g de maicena.
3 huevos.
1 cucharadita de azúcar vainillado.
Además para decorar:
Piñones.
Azúcar.
Para la crema pastelera:
Poner todos los ingredientes en el vaso y programar 7 minutos, temperatura 90º, velocidad 4.
Retirar a un recipiente y cubrir con film transparente pegado a la para que no se haga costra. También podemos echarla directamente en la manga pastelera.
Dejar enfriar y reservar en el frigorífico como mínimo durante 1 hora antes de utilizarla.
Para la masa:
Colocar todos los ingredientes de la masa menos la mantequilla y la levadura y amasarlos. Mejor si es con un robot de cocina, ya que es un amasado largo, aunque lo podéis hacer también a mano.
A mitad del amasado incorporar la mantequilla fría del frigorífico y cortada en trozos no muy grandes. Seguir amasando y cuando falten pocos minutos agregar la levadura desmenuzada.
Una vez preparada la masa, dejar reposar durante una hora y media a temperatura ambiente tapada con un paño para que no se seque.
Pasado este tiempo, dividir la masa en 4 porciones iguales (saldrán más o menos porciones de 250 gr.). Dar forma de bola y dejar reposar en la nevera durante media hora aproximadamente.
A continuación estirar la bola con un rodillo hasta obtener una pieza ovalada que tenga sobre 1 cm de grosor. Colocar la coca sobre la bandeja de horno, pintarla con huevo batido y ponerla en un sitio cálido y sin corrientes de aire para que fermente y doble su volumen.
Una vez que la coca haya fermentado, poner la crema pastelera sobre ella y terminar espolvoreando los piñones y azúcar en grano.
Hornear con el horno precalentado a 190º durante unos 14 minutos. Dejar enfriar.