Ingredientes:
250 gr de carne picada
2 puerros
150 gr de crema fresca
200 gr de queso
1 l de caldo
Sal
Pimienta
1 cebolla
Aceite de oliva
Cómo preparar una sopa de puerros con carne picada
Esta sopa es muy fácil de preparar nos aseguraremos de que tengamos a mano una buena materia prima para conseguir el resultado deseado. Empezaremos con los protagonistas del plato, los puerros.
Pelamos los puerros, les quitaremos la parte verde y cortaremos la blanca en trocitos del mismo tamaño. Le daremos un buen complemento a estos puerros con la llegada de la cebolla, la vamos a pelar y cortar en trocitos pequeñitos.
Ponemos en una sartén un chorrito de aceite y le añadimos la cebolla. Dejaremos que se cocine durante unos minutos, añadimos un poquito de sal para acelerar el proceso.
Cuando la cebolla empiece a estar tierna le ponemos la carne picada. Este ingrediente lo ideal es que sea mixto, podemos poner la mitad de carne picada de cerdo y la otra de ternera, lo más fresca posible, si es posible picada al momento.
En el momento en que la carne quede suelta le incorporamos el puerro. Lo ponemos y mezclamos bien con el resto de los ingredientes.
Le añadiremos el caldo para darle la consistencia necesaria a esta sopa. Incorporamos la crema y el queso, estos dos elementos le aportarán una cremosidad de lo más especial, esta sopa de puerro no tiene nada de convencional, es una receta sencilla y original que nos conquistará de inmediato.
Dejamos que todos los ingredientes se cocinen durante unos 10 minutos. Es importante que se cocine a fuego lento para que quede lo más suave posible y no se nos quede muy densa. Si es necesario podemos añadir un poco más de caldo o agua hasta conseguir la textura deseada. Tendremos listo un plato de restaurante.